Granada es la segunda ciudad con menor conexión AVE con Madrid
El trazado de alta velocidad por Antequera requiere completar 570 kilómetros hasta la capital de España y emplear 3,18 horas de tiempo

La recuperación económica que el Gobierno espera se consolide en todo el territorio nacional en este próximo 2022, supondrá un esfuerzo mucho mayor para una provincia como la granadina. Su potente sector servicios, donde el turismo es la locomotora que tira del mismo, sigue padeciendo un importante déficit en lo tocante a las conexiones ferroviarias. Y más en concreto al servicio de trenes diarios de alta velocidad (AVE) entre las ciudades de Granada y Madrid. Lo cierto es que hemos llegado prácticamente al término del presente año -el cierre de esta información se sitúa  pocas fechas antes de que comiencen los festivos de Navidad- y el número de conexiones entre ambas capitales se mantiene en dos, una menos que antes que se desatara la pandemia y la mitad del objetivo previsto allá por 2019 de que fuesen cuatro las relaciones diarias AVE entre Granada y Madrid y otras tantas en sentido inverso. Y ello a pesar de que este medio de transporte tiene una gran aceptación entre los turistas que quieren pasar unos días de asueto en la ciudad de la Alhambra, como quedó demostrado en el pasado ‘puente’ de la Constitución-Inmaculada. Ante los trenes llenos, muchos no tuvieron más remedio que utilizar su vehículo particular u optar por el avión.

Renfe mantiene las dos conexiones AVE citadas entre Madrid y Granada, en ambos sentidos, y complementa las mismas con otras opciones de combinación de billetes para hacer trasbordo en otros puntos del recorrido. A ello añadió recientemente, el pasado 3 de diciembre, un tren Intercity directo entre ambos puntos pero que tan solo circula los fines de semana. El tiempo es muy similar al que emplean los AVE y el precio de sus billetes, más económico. Según aseguran fuentes de la propia compañía, el objetivo es dar cobertura a la demanda turística que se origina precisamente entre viernes y domingo. Cabe deducir, por tanto, que los AVE no dan cobertura completa a la misma.

Mapa ferroviario

Llegados a este punto, cabe echar un vistazo al mapa ferroviario nacional de alta velocidad. De la veintena de capitales de provincia que están comunicadas con Madrid mediante trenes AVE, tan sólo la ciudad de Huesca tiene menos conexiones diarias que Granada, con una en ambos sentidos. Granada ‘empata’ con otras cuatro más -Valladolid, Palencia, León y Castellón-, mientras que las 14 restantes le ganan por goleada. El agravio comparativo que padece Granada con respecto a las ciudades que cuentan con igual número de conexiones AVE, las antes citadas, así como con Huesca, que sólo dispone de un enlace por sentido, resulta evidente al considerar que ninguna de ellas se acerca -ni de lejos- al número de visitantes que llegan a la ciudad de la Alhambra todos los años, pues si exceptuamos el ejercicio largo de parón provocado por la Covid-19 y que limitó la movilidad de manera extraordinaria, los datos estadísticos del INE nos revelan que en el pasado 2019 recalaron en la provincia granadina un total de 3.263.203 visitantes, con un incremento del 7,25% sobre el ejercicio precedente. Un aluvión de personas que supera en mucho a las que optaron por cualquiera de las ciudades en comparación, incluso superior también a muchas otras que cuentan con mayor número de conexiones AVE con Madrid, tal es el caso de Gerona, Guadalajara, Ciudad Real, Tarragona o Cuenca, por citar tan solo a unas cuantas.

Igual cabría decir si la mirada la ponemos en las ciudades andaluzas que también cuentan con enlaces en alta velocidad con la capital de España. Sevilla, Málaga y Córdoba disponen de un número mucho mayor. La ciudad hispalense dispone de ocho diarias en cada uno de los sentidos; la capital malagueña, de siete, mientras que la ciudad cordobesa dobla el número de ambas y tiene 16 relaciones AVE, un número que se explica porque los trenes de las dos ciudades anteriores más los de Granada pasan obligatoriamente por su estación y hacen parada en la misma al utilizar idéntica infraestructura ferroviaria. En todos estos casos, el peso poblacional de las capitales andaluzas mencionadas justificaría un mayor número de trenes AVE para dar cumplida cuenta al servicio, pero no si nos atenemos al peso turístico de las mismas pues Granada sigue liderando el mismo.

Tiempo

Otro factor a tener en cuenta a la hora de analizar el servicio que prestan los trenes AVE que unen Granada con Madrid y viceversa cada día de la semana, es el tiempo que emplean en el recorrido. Dicho queda que el trazado diseñado para unir ambas ciudades -cuestión que generó un discreta polémica en su momento, ante la opción de uno más directo a través de Moreda y Jaén siguiendo la vieja línea ya prácticamente en desuso- y que opta por un rodeo por Antequera para discurrir hacia Córdoba y de ahí hasta Madrid, conlleva 570 kilómetros. El problema es que trenes capaces de superar ampliamente los 300 kilómetros de velocidad punta, se demoran tres horas y 18 minutos en completar ese recorrido. Si tomamos en consideración que en cada una de las cuatro o cinco paradas que hacen en cada trayecto, apenas se detienen unos pocos minutos, tendríamos que concluir que emplearan poco más de dos horas. Pero no es así. Y la principal razón que justifica esa demora es que un buen tramo entre Granada y Antequera dispone de una sola vía por la que han de circular todos los trenes, convencionales y de alta velocidad, con el agravante conocido de que en el paso por Loja han de reducir la marcha a 50 kilómetros por hora. Si comparamos este tiempo de recorrido con el que emplea un conductor de un turismo para recorrer los 420 kilómetros que separan por carretera Madrid de Granada y que supera en muy poco las cuatro horas, si se respetan los límites de velocidad, se puede concluir que resulta más competitivo el uso del automóvil. Al menos, más económico al poder viajar en el mismo hasta cinco personas.

De vuelta al mapa de las conexiones en alta velocidad entre Madrid y la veintena de capitales de provincia antes mencionadas, surge otro agravio para Granada nada más ver el tiempo necesario de desplazamiento. Sólo una ciudad, las más alejada como es Gerona, tiene un trayecto con mayor tiempo de duración: 3,34 horas. El resto disfruta de enlaces mucho más rápidos, bien porque el número de kilómetros es menor, porque los trenes alcanzan medias de velocidad más altas o por la combinación de ambos factores. A título de ejemplo, el recorrido en AVE entre Madrid y Barcelona se lleva a cabo en 2,30 horas.

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