Especial-Polígono Industrial Juncaril • Granada Económica

REPORTAJE /  GRANADINOS Y EN VANGUARDIA

“La tercera generación de Pinturas Vicmar crece a un magnífico ritmo”

PASIÓN POR LA INNOVACIÓN/ Pinturas Vicmar destina parte de sus ingresos a la investigación

Pinturas Vicmar nace en mayo de 1974, “a nivel de pluriempleo”,  tal y como reconoce su fundador, Víctor Aranda Martín. Y es que Aranda trabajó primero -y simultáneamente- en Maracena en una empresa de fabricación de cañas de pescar.

Ya en esa primera experiencia laboral, el ‘alma mater’ de pinturas Vicmar mostró dotes de dirección así como inquietudes permanentes por mejorar cualquier aspecto relacionado con el trabajo en la fábrica, por obtener una mayor productividad y calidad. Esa actitud le valió el reconocimiento de la dirección de la empresa que se tradujo en puestos de mayor responsabilidad y una mejor remuneración económica. La factoría maracenera no puedo soportar los conflictos sociales y sindicales que trajo consigo la modélica transición política. Ni siquiera los trabajadores, en régimen de cooperativa, pudieron enderezar el rumbo de la otra próspera firma de cañas de pescar. Pero Víctor Aranda sabía, al igual que un reducido grupo de compañeros, que la empresa iba a cerrar con el tiempo de antelación suficiente como para hacer crecer un incipiente proyecto de empresa que, a la postre, sería una de las empresas líderes del sector de la pintura en la provincia de Granada. 

Los comienzos

Como todo comienzo, el de Pinturas Vicmar también fue muy duro. “Recuerdo -explica Aranda- que me presenté en Valencia para  intentar quedarme con la comercialización de un marca de pinturas con las escrituras de mi nave como único aval, más la capacidad de trabajo de mi mujer y la mía. Y me dieron la delegación para esta zona de Málaga y Granada”.  De aquel primer fabricante, con el que mantiene relaciones comerciales hasta nuestro días, guarda Víctor Aranda un recuerdo especial por la confianza que depositó en la recién creada Vicmar, justo en el momento en que una empresa necesita más apoyo. Vicmar ha superado la primera sacudida de la crisis con notable, según aseguran desde la administración la dos hijas de propietario, María Angustias y Noelia, a la sazón, responsables de la citada área. Hay que tener en cuenta que la empresa facturaba una importante cantidad de producto al mundo de la construcción y la estrepitosa caída de éste se ha dejado sentir. Sin embargo, eso no se ha traducido en descenso grave de los beneficios porque los márgenes en la construcción son muy reducidos. Se vende mucho pero por poco margen y no siempre es rentable la decisión. Ahora, la empresa granadina está perfectamente equilibrada y afronta el futuro con optimismo, con los deberes hechos. “La rentabilidad de ahora -asegura Aranda- es próxima a la que teníamos antes pero con mucha menos facturación. Además no lo hemos buscado, es que ha salido así”. En cuanto a la situación de ventas durante el primer trimestre, Pinturas Vicmar no hace un balance positivo, pero hay que tener muy presente que la climatología es fundamental para estimular al sector porque nadie pinta si no hace buen tiempo, si no hace sol. Por esa razón, el fin de la temporada de lluvias puede implicar un importante aumento de pedidos para satisfacer a esa demanda embalsada. A ese hecho, naturalmente, también hay que sumar la incertidumbre que existe en los consumidores y “prueba de ello -matiza- es que la tasa de ahorro sigue creciendo”.  La empresa, cuyo ámbito geográfico se centra fundamentalmente en Granada y provincia, comercializa todas las marcas de pintura que existen en el mercado y, muy importante, pueden proporcionar documentación técnica y sobre seguridad a todos los niveles,  algo siempre útil para los profesionales.  El consejero de seguridad de la empresa, hijo del fundador, es Enrique Aranda. 

I+d

Pinturas Vicmar apuesta por el I+d de forma extraordinariamente decidida, considerando que es una pyme de 10 trabajadores. En la actualidad, en su más que bien equipado laboratorio, al frente del cual está Victor Aranda hijo, se ensaya con distintos productos y soluciones de cara a mejorar los  existentes en el mercado. Aunque aún es prematuro y la empresa no puede adelantar mucho, es muy probable que en breve se anuncie la formulación de un producto nuevo con unas características hasta ahora desconocidas en la pintura tradicional y que puede provocar una verdadera revolución en el sector. De momento, adelantaremos que es de ‘cosecha propia’ y que va a ayudar a reducir la factura energética en los hogares y edificios que lo empleen de manera sustancial.  

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