“Es fundamental la labor de servicio integral al socio que se realiza desde las cooperativas”

En la comarca del Poniente granadino, en una zona privilegiada que linda con las provincias de Córdoba y Málaga, nos encontramos Aceites Algarinejo, cuya producción de aceite de oliva virgen extra, está marcada por la Denominación de Origen Poniente de Granada, a la que pertenece. 

Esta cooperativa se fundó en 2002 gracias a la iniciativa de 387 olivareros que hoy, tras diez años de actividad, han pasado a ser 645, lo que supone que más del 80 por ciento de los agricultores de Algarinejo son socios de la cooperativa. Además de en número de socios, esta sociedad también ha aumentado su capacidad productiva con el paso de los años. Su presidente-gerente, Antonio Rafael Almirón Arenas, comenta que si bien en sus inicios se recogían en torno a los 6 millones de kilos de aceituna, en la actualidad la cifra alcanza una media de 10 millones de kilos.

Para el tratamiento de la aceituna, Aceites Algarinejo cuenta con unas instalaciones con cuatro líneas de recepción, cuatro líneas de lavado y limpieza, y tres líneas de extracción de aceite, de las cuales dos son de molturación y una de repaso. Se completa con una bodega con una capacidad de almacenaje de más de 2 millones de kilos.

La cooperativa emplea entre tres y diez trabajadores en función de la campaña y tiene un volumen de facturación que oscila entre los 4 y los 5 millones de euros, cantidad que según afirma Antonio Rafael Almirón «es muy posible que superemos este año».

El aceite

El aceite que elabora la cooperativa de Algarinejo procede fundamentalmente de tres variedades de olivo que se recogen de forma tradicional. Dichas variedades son picuda, hojiblanca y marteña, que suponen el 60 por ciento, 30 por ciento y 10 por ciento del olivar, respectivamente. La picuda tiene la particularidad de ser autóctona de la zona de Priego de Córdoba, Algarinejo y Montefrío y produce un aceite con características excelentes y muy particulares de la zona, «y esto es lo que nos está dando nombre», indica el presidente de la cooperativa. Y es que no todos los tipos de aceites son iguales. Las diferencias en el aceite dependen de la tierra, forma de elaboración, variedades y la edad del olivar. En el caso de Algarinejo, sus olivos centenarios y variedades que sólo se dan en esta comarca producen un aceite con aromas, olor, color y otras características magníficas y únicas.

Las marcas para la comercialización del producto de Aceites Algarinejo son dos: Orodeal y Alcocei. El primero es un virgen extra con Denominación de Origen envasado en varios formatos con las características monovarietal picuda y hojiblanca, mientras que el Alcocei es un virgen extra en botellas de pet. de 5 litros.

El producto de Aceites Algarinejo puede encontrarse en la mayoría de los centros comerciales del territorio nacional y fuera de nuestras fronteras es exportado a países como Alemania, Francia, Inglaterra e Italia. 

La comercialización se apoya también con una tienda virtual donde pueden encontrarse las dos marcas de la cooperativa, en distintos formatos.

Apuesta por el cooperativismo

Cerca de 400 agricultores apostaron en su día por unirse y constituirse como cooperativa, una fórmula que ha vuelto a resurgir en estos últimos años por los beneficios que supone el cooperativismo. Antonio Rafael Almirón destaca «la gran labor que se realiza en las cooperativas de servicio integral al socio. En nuestro caso apoyamos todo el proceso, desde el campo hasta el cliente final, y eso vale mucho». Así por ejemplo, entre los servicios de Aceites Algarinejo se encuentra la venta de gasoil en condiciones más favorables, asesoramiento a través de un técnico agrícola, abastecimiento de abonos y fitosanitarios, alquiler de maquinaria… y también apoya especialmente la formación del agricultor con la impartición de cursos sobre temas relacionados con el sector y destinados a mejorar la actividad.

Aceites Algarinejo pertenece a su vez a la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas Agrarias (FAECA), que representa y defiende los intereses económicos y sociales del movimiento cooperativo andaluz.

De cara al futuro, el presidente-gerente de Aceites Algarinejo va más allá y apuesta por la unión de comarcas y denominaciones de origen «de manera que seamos capaces de comercializar en conjunto aceites con características similares». En su opinión «no es bueno que vayamos al mercado tantas marcas de aceite. Tenemos que encontrar la fórmula para vincular aceites similares», apostilla. «En nuestro caso, y defendiendo la existencia de las denominaciones de origen de los Montes y el Poniente, tendríamos que llegar al acuerdo de comercializar juntos, porque es posible la convivencia de las dos denominaciones bajo un mismo fin», aclara.

Asimismo aboga por unir la venta de productos granadinos y andaluces diferenciados con una marca de calidad en un único punto: «Esta es una forma de economizar la venta de nuestros productos –aceites, jamón, charcutería…– y nos permitiría estar presentes en lugares estratégicos como Madrid y Barcelona».

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