Conchi HERNÁNDEZ-VILLALOBOS: ¿A quién benefician las medidas para la reducción del déficit público?

 

Ante una situación económica en la que la cifra de parados alcanza los 4,5 millones y el déficit está en el 9,5% del PIB, a lo que hay que sumar la falta de financiación y, por supuesto, la falta de confianza en el mercado, es urgente la adopción de medidas.

 

¿Son las medidas propuestas por el Gobierno las más adecuadas? ¿A quién benefician? En España, en los últimos tiempos, el Gobierno ha pretendido ser excesivamente intervencionista, disponiendo de recursos a favor de procesos poco productivos, lo que ha hecho que la economía no sea competitiva,  enfocando su política hacia una economía social y olvidando a las pymes y autónomos como núcleo fundamental del tejido empresarial del país. Por ello, para potenciar su supervivencia y competitividad, habría que reducir las cuotas empresariales según su volumen de facturación y beneficios, por otro lado deducir las aportaciones sociales para todos los nuevos trabajadores que se incorporen a las empresas, siempre que se cumpla el criterio de incrementar el empleo neto de la misma. Por último creo interesante adaptar anualmente los módulos de cotización de los autónomos a la situación económica. La construcción es la principal actividad de nuestra economía y pararla mediante su desincentivación fiscal será un error que costará millones de puestos de trabajo en los próximos años por lo que a diferencia de lo que se propone,  habría que incentivar las deducciones fiscales para la vivienda, con un tope máximo de deducción pero de la cual se puedan beneficiar todo tipo de rentas.

Terminar con el déficit energético debería ser otra de las prioridades del Gobierno.  España debería impulsar el uso de las renovables para autoabastecerse a medio plazo ya que comprar energía no es una solución.  Esta claro que este esfuerzo no tiene sentido sin una drástica reducción del gasto público. Creo  necesario eliminar ministerios superfluos e intentar coordinar el gasto en Ayuntamientos, Comunidades Autónomas y Estado, así como dejar de mantener empresas públicas cuyo rendimiento económico es negativo y utilizar ese capital para reactivar la economía. El sistema público de pensiones en los próximos años puede encontrarse en riesgo, por lo que parece evidente la necesidad incentivar las deducciones fiscales para el ahorro en cualquiera de los instrumentos de jubilación, así como estimular las deducciones fiscales a las familias numerosas, con objeto de incentivar los cambios en la pirámide de población prevista.

Por otro lado, y según la asociación de Inspectores de Hacienda, el control sobre la economía sumergida, que en nuestro país asciende a más de doscientos mil millones de euros anuales, daría para evitar muchos recortes y congelaciones como los actuales.

En definitiva, del diagnóstico de los mercados y de los organismos económicos internacionales sobre la economía española, cabe concluir que es imprescindible la adopción de medias drásticas para poder reiniciar cotas de progreso y prosperidad. 

 

 

*Conchi Hernández -Villalobos es abogada y asociada en Granada del despacho Cremades & Calvo Sotelo.

Compartir es demostrar interés!