Un gran centro de investigación de la UGR, primer paso hacia el acelerador de partículas
Esta infraestructura, junto con una estación meteorológica ya en marcha, son esenciales para que el proyecto Ifmif-Dones que la Unión Europea plantea llevar a cabo en Escúzar sea una realidad
El proyecto del acelerador de partículas que la Unión Europea (UE) pretende llevar a cabo en el Parque Metropolitano, Industrial y Tecnológico (PMIT) de la localidad granadina de Escúzar, va ‘quemando’ etapas y acercando su materialización en el tiempo. Buena prueba de ello es que instalaciones relacionadas con el mismo, caso del centro de investigación sobre el Ifmif-Dones que promueve la Universidad de Granada (UGR) y de la estación meteorológica que recogerá datos imprescindibles para la concepción y desarrollo del acelerador, ya están en marcha. El primero de los dos, el más complejo sin duda, ya tiene parcela donde ubicarse y diseño de sus instalaciones. El segundo ya puede apreciarse en unos terrenos reservados para el propio acelerador, concretamente en la zona sur de los mismos.
El buen funcionamiento de ambas instalaciones es imprescindible para que la UE apueste finalmente por Escúzar para el proyecto del acelerador de partículas, que tiene un presupuesto de inversión que según las fuentes que se consulten oscila entre los 600 y los 1.000 millones de euros. Un dinero con el que sufragar unas instalaciones donde se investiguen los procesos de fusión nuclear, la energía limpia llamada a ser la gran protagonista en la segunda mitad del presente siglo e incluso más allá. Muy a grandes rasgos, la fusión consiste en la unión de núcleos ligeros de materia para formar uno más grande y pesado que permitiría generar una gran cantidad de energía. Si no surgen retrasos, en principio el Ifmif-Dones tendría que estar operativo allá por 2029, de ahí que todas las instalaciones previas que necesita estén operativas cuanto antes. Un plazo, no obstante, que parece muy corto para un proyecto tan complejo.
Laboratorio
Por lo que al centro de investigación se refiere, la UGR y el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat) dieron a conocer el pasado mes de abril las principales características del mismo en un encuentro telemático. Se levantará en una parcela de 4.500 metros cuadrados del PMIT, que albergará unas instalaciones de 3.500. A tenor de la información hecha pública en ese encuentro, el edificio contendrá una sala donde se montarán equipos específicos del acelerador, un laboratorio de caracterización de materiales estructurales, una unidad de mecatrónica, y finalmente un laboratorio para el montaje de prototipos y realización de experimentos funcionales. Junto a todo lo anterior, el espacio se repartirá en distintas áreas científico-tecnológicas en las que se estudiarán sistemas de diagnóstico avanzados de distintas áreas del Ifmif-Dones, como el haz del acelerador, diagnósticos de radiación, gases, isótopos radiactivos y otros. También servirá para preparar experimentos de distintas áreas tecnológicas que se desarrollen en las instalaciones propias del acelerador así como para el estudio de los materiales que interesan en un proceso de fusión. E incluso, el alcance de este tipo de investigación en aplicaciones médicas, como el tratamiento del cáncer.
Enrique Herrera, vicerrector de Investigación de la UGR, asegura que este centro de investigación “no solo resulta imprescindible sino que es complementario” para el desarrollo del propio acelerador. En declaraciones a GRANADA ECONÓMICA, anticipa también que habrá grupos de investigación que no trabajen en el Ifmif-Dones pero sí en actividades complementarias tan relevantes como las del impacto de iones de hidrógeno, cuestión de trascendencia en ámbitos como el citado de la medicina. O en todas las relacionadas con con el diseño y construcción del propio inmueble que albergará el acelerador, para que éste sea sostenible y tenga una larga permanencia en el tiempo. De igual modo, otro grupo, en este caso relacionado con la inteligencia artificial, centrará sus trabajos en el el estudio de datos. “Este centro de investigación tendrá a su vez un efecto ‘tractor’ para que distintos investigadores de materias muy diversas trabajen con nosotros, también de la mano del Ciemat”, explica Herrera. De hecho, la intención de la institución académica granadina es la de firmar distintos convenios con con universidades y centros de investigación de diferentes países, con el objetivo de que jóvenes investigadores completen su formación en ellos y luego trabajen en Escúzar. Preguntado por el alcance de de estos grupos en número de expertos, Herrera estima que serán unos 15 o 20 que sumarán un total de 150 personas. Por lo que al presupuesto se refiere, las dos partes del mismo corresponden a la compra de los terrenos, que tendrá un coste de 400.000 euros, y al edificio, que sumará 4,5 millones. La dotación de éste, maquinaria y laboratorios, no está cuantificada aún.
Otros hitos
La UGR, además de la próxima ejecución del mencionado centro de investigación del acelerador, desarrolla una amplia línea de actuación relacionada, como es obvio, con el proyecto del Ifmif-Dones. En el mencionado encuentro virtual de responsables del Ciemat y de la institución académica granadina, se dio cuenta de otros hitos ya puestos en marcha, como la oficina para la implementación del Ifmif-Dones, la oficina técnica, los prototipos de componentes de Dones, el laboratorio de realidad virtual para tareas de manipulación remota en Dones, el programa de investigación formación y movilidad o la oficina para el Consorcio Nacional para el desarrollo del Ifmif-Dones, entre otras. Algunas de estas iniciativas están en marcha y otras comenzarán en breve su andadura.
En paralelo a todo lo anterior, la UGR ha enviado ya a la Junta de Andalucía diez proyectos capitales para potenciar el tejido empresarial y de investigación relacionado con el acelerador de partículas. Herrera señalaba a este periódico que tres de ellos resultan básicos: el de inteligencia artificial, en colaboración con la empresa Indra, que está en un coste de unos 50 millones de euros; otro relacionado con la investigación de materiales, y uno más relacionado con las tecnologías verdes y la economía circular. “Ahora mismo trabajamos en un proyecto para predecir el cambio climático y que también está relacionado con la biodiversiadad”, añade el vicerrector de Investigación.
Primer paso
Lo que ya es una realidad, un primer paso constatable desde el exterior, en todo el proyecto del Ifmif-Dones, es la implantación de una estación meteorológica que recoge datos que serán imprescindibles para el diseño y funcionamiento futuro del acelerador. En la parcela que hay reservada para las futuras instalaciones que ocupará éste, ya pueden apreciarse los distintos componentes con los que se recogen a diario los principales fenómenos meteorológicos (humedad, temperatura, viento o precipitaciones, entre otros), entre los que destaca una gran antena con distintos sensores. Funciona de forma totalmente autónoma y los datos que recoge son enviados enviados para su estudio a los técnicos encargados de ello.
Con todos estos mimbres, Herrera agrega que “la comunidad científica del ámbito de la fusión ha dado ya el visto bueno al proyecto del acelerador, como lo ha hecho también la comunidad académica. Ya solo queda el momento en que desde la Unión Europea se decida acometer el proyecto”. De lo anterior deduce el profesor Herrera que el Plan de Recuperación que ha elaborado el Gobierno de España para poder recibir los fondos europeos, “puede ser una buena percha de la que colgar esta iniciativa, para no dilatar en el tiempo la puesta en marcha de la misma”.
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